lunes, enero 24, 2011

Año nuevo...tópico pretérito

No llueve eternamente”.

“Antiguamente, la gente creía que cuando alguien muere, un cuervo se lleva su alma al mundo de los Muertos, pero a veces ocurre algo tan terrible, que junto con el alma, el cuervo se lleva su profunda tristeza, y el alma no puede descansar. Pero a veces, solo a veces, el cuervo es capaz de traer de vuelta el alma, para enmendar el mal. “

“Si nos roban a nuestros seres queridos, la forma de hacer que vivan más tiempo es no dejar de amarlos nunca. Los edificos arden, las personas mueren, pero el amor verdadero es para siempre.”

“Para Shelley, las pequeñas cosas significaban tanto… Yo solía pensar que eran triviales. Créeme, nada es trivial.”

“Madre es el nombre que dan a Dios los labios y los corazones de los niños¨.

“La infancia termina cuando sabes que vas a morir.”


En el año nuevo que comienza, y aunque suene a tópico, todos nos proponemos mejorar esto o aquello. Buen ejemplo de esto es que aumentan las inscripciones en los gimnasios, que por otra parte a estas alturas de mes se quedan muchas veces en solo eso, meras intenciones que no resisten o flojean en el transcurrir de los días. Otros decimos que vamos a dejar de fumar y … Ay! Tal y como está el debate de la ley anti tabaco mejor no darles muchas vueltas a estos temas que a la fin y a la postre sólo nos revelan lo muy hipócrita que es el mundo que nos rodea y hasta qué punto... y perdonadme la expresión, nos mean por encima y decimos que llueve.

Un par de ejemplos son suficientes para entrever algo que nos delata y es que el ser humano tiende o pretende, quizás mejor decir: ansía mejorar. El propósito es firme, sin embargo somos animales de costumbres y en lo que a éstas se refiere, cambiarlas es algo complejo que nada tiene que ver con el principio o fin de un periodo de tiempo indeterminado pero si que ayuda a que algunos pocos consigan sus metas.

Yo me contentaría con alcanzar uno de los muchos cambios que he tenido en mente en los últimos tiempos. Ver transformado en realidad alguno de ellos significaría que tengo un aliento renovado para la lucha particular en la que me veo inmersa.

Echando atrás la vista, me leo y veo cómo la enfermedad me está dando un enfoque nuevo de todo aquello que me rodea y , aunque sigo siendo la misma, si he cambiado algunas de estas costumbres sin darme apenas cuenta y lo que es peor, sin gastar esfuerzos en proponérmelo. Esta es otra de las ironías que la vida nos reserva.

Os preguntaréis a cuento de qué esta inmersión en la filosofía más áspera y de andar por casa que me gasto últimamente y es que, de verdad os digo, que si de esta no va a mi se me agotan hasta las ideas y lo que es peor, las fuerzas.

No voy a dejar por ello de agradeceros a todos vuestra presencia. Sé que estáis ahí, siempre a mi lado y aunque pueda resultar pesada y repetitiva tengo y debo decir que muchas veces habéis sido vosotros quienes me habéis dado fuerza para seguir adelante, por ello vaya siempre por delante mi agradecimiento para con todos los que de un modo u otro, hacéis que os sienta cercanos y presentes en mi vida como si formaseis parte de mi familia, familia que no me falla y lucha conmigo al igual que mi pareja, aunque ahora siento mucho la ausencia de mi abuela, un pilar muy importante para mi y que también esta cáustica vida ha decidido quitarme.

Prefiero pensar que me pone a prueba, como un duelo de a ver quién es la más fuerte, supongo que por mi carácter es lo que me provoca y me empuja a quitarle la razón.

Es por ello que a pesar del dolor me tenéis aquí, tratando de haceros llegar, si no una lista detallada de cómo me encuentro ni enumerando tampoco los pasos que trato de dar para llegar a un diagnóstico, al menos haciéndoos leer un tostón que pretende ser un desahogo y al mismo tiempo un haceros ver que sigo aquí, peleándome con mi enfermedad y todo lo que ella supone. Espero que cuando consiga reunir el valor y aguante suficiente como para volver a escribir, sea un relato que, y ya para no salirme del estilo que llevo lo escrito, se convierta en un bocado delicado exquisitamente sabroso y jugoso que ofrezco a mis más distinguidos gourmets de bouquet delicado pero intenso, que perdura en el tiempo impregnando la memoria del que lo degusta. En pocas palabras y hablando en plata: a ver si de un puñetera vez dan por fin con lo que tengo.

Un abrazo enorme a todos y gracias por seguir ahí, no cabría esperar otra cosa dada la calidad humana que tenéis.

PD: Ni caso a estas rayadas mentales que me dan, el caso es que la intención es la de haceros saber que sigo aquí, os leo pero lo de siempre, el dolor me impide estar al quite como os merecéis.

PD2: El cambio pasa por un nuevo vestidito al blog y también por dejar atrás los enrevesados comentarios entre Sancho y Don Quijote que me representaban a mi y mi enfermedad..( esto puede ser un rasgo de locura no? jajaja, me río por no llorar, esto de racionalizar una agonía es absolutamente tan cruel que te hace pensar lo peor, incluso hasta que empiezas a perder un poquito de aceite o que uno ya discurre como un vertedero).. dejamos atrás mi Cervantismo particular y damos cabida a las frases que de un modo u otro marcaron mi vida. En este caso todos habréis descubierto ya a qué película pertenecen... ¿verdad? y si no lo sabéis en mi próxima reaparición os diré cuál es y por qué creo que de no haberla visto deberíais verla. Es un modo también de obligarme a aparecer más a menudo del mismo modo que me obligo a otras tantas cosas que ya os iré desgranando para poneros al día.

3 comentarios:

famalap dijo...

Me alegro muchísimo el saber que estás aquí, a pie de cañón... te echamos mucho de menos, pero con todo lo que tienes, nos contentamos con que de vez en cuando nos "filosofees", je,je,.
Hace dos días, le hablaba a mi madre de tí y de tu caso y le mostré mi preocupación por no saber cómo te encontrabas, aunque una parte de mí, me decía que ahí seguís, LUCHANDO!

Biquiñossss

La Casa Sin dijo...

Messaggero, no te preocupes por nosotros; seguiremos aquí siempre, esperando a que estés mejor para contarnos, mandándote apoyo y cariño para que sepas que no estás sola y que estamos ahí para ti.

Filosofa lo que quieras, protesta, gruñe, grita, riéte, cuéntanos las idas peregrinas que se te pasan por la cabeza (seguro que nosotros también hemos pensado lo mismo en algún momento)... estamos aqui para acompañarte en el camino tan largo que te ha tocado recorrer. Para agarrarte si caes, animarte a seguir y hacer todo lo que podamos.

Un besote enorme.

glutoniana dijo...

Agárrate a las pequeñas cosas que te hacen feliz ni que sea poco tiempo.

Siento lo de tu abuela, aunque es duro veo que lo afrontas como una lucha.

No decaigas! Y si caes algún ratito seguro que tienes al lado gente que te quiere para ayudarte a levantar.